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El reglamento eIDAS, adoptado oficialmente por la Unión Europea el 23 de julio de 2014, es un hito importante en la digitalización de Europa. Establece un marco legal para la identificación electrónica y los servicios de confianza, promoviendo la interoperabilidad entre los Estados miembros. Este texto regulatorio, simbolizado por el número 910, define entre otras cosas los niveles de garantía asociados a una identidad digital. Descubre los puntos clave de este reglamento en el artículo a continuación.
El alcance del reglamento eIDAS
El impacto de eIDAS en la identificación electrónica
El reglamento eIDAS ha influido considerablemente en la evolución de la identificación electrónica en Europa, introduciendo una serie de normas obligatorias para garantizar la seguridad y fiabilidad de las transacciones digitales. El impacto de este reglamento es múltiple:
Fortalecimiento de la seguridad: Las normas de eIDAS han permitido reforzar la seguridad de los sistemas de identificación digital, estableciendo criterios precisos en materia de protección de datos y resiliencia de los sistemas.
Interoperabilidad: eIDAS ha favorecido la interoperabilidad entre los Estados miembros, permitiendo el reconocimiento mutuo de las identidades electrónicas para las transacciones transfronterizas.
Innovación: Al definir un marco regulatorio claro, eIDAS ha estimulado la innovación en el campo de la identificación electrónica, abriendo el camino a nuevas soluciones y servicios digitales.
Sin embargo, el impacto de eIDAS no se limita a estos aspectos. También cabe destacar el papel de este reglamento en la ampliación del uso de la identidad digital a nuevos ámbitos y en la mejora de la cooperación entre los Estados miembros.
Los servicios de confianza de eIDAS
El reglamento eIDAS establece una serie de servicios de confianza que contribuyen a la seguridad y fiabilidad de las transacciones digitales. Estos servicios son esenciales para garantizar la integridad, autenticidad y confidencialidad de los datos intercambiados en línea. Incluyen:
La emisión de certificados para firmas y sellos electrónicos, así como para la autenticación de sitios web. Estos certificados permiten verificar la identidad de las partes involucradas en una transacción digital.
La validación de sellos y firmas electrónicas, que confirma su validez y conformidad con el reglamento eIDAS.
La conservación de sellos y firmas electrónicas, que garantiza su disponibilidad e integridad a largo plazo.
Estos servicios son proporcionados por prestadores de servicios de confianza, que están sujetos a estrictos requisitos en términos de seguridad y fiabilidad.
En Signaturit, somos un proveedor de servicios de confianza reconocido por eIDAS. Todos nuestros servicios de firma, sellado de tiempo y archivo siguen estrictamente la normativa europea y ofrecen la cobertura legal más robusta del mercado.
La entrada en vigor de eIDAS: fechas clave
La adopción del reglamento eIDAS V2 por el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea marcó fechas clave para la evolución de la identidad digital en Europa. El proceso se desarrolló de la siguiente manera:
El 29 de febrero de 2024, el Parlamento Europeo adopta formalmente eIDAS V2, abriendo el camino a cambios importantes en el panorama de la identificación electrónica.
El 26 de marzo de 2024, el Consejo de la Unión Europea da su aprobación, validando así la adopción del reglamento.
El 20 de mayo de 2024, eIDAS V2 entra oficialmente en vigor, reemplazando al anterior reglamento n°910/2014.
Estas fechas marcan el inicio de una nueva era para la identidad digital y los servicios de confianza en Europa.
La firma electrónica según eIDAS
Los 3 niveles de firma electrónica
El reglamento eIDAS distingue tres niveles de firma electrónica. Estos niveles ofrecen una gradación en términos de seguridad, fiabilidad y validez jurídica.
La firma electrónica simple: Es el primer nivel. Ofrece cierta garantía sobre la identidad del firmante pero no ofrece una garantía total.
La firma electrónica avanzada: Ofrece un nivel de seguridad más alto que la anterior. Está vinculada al firmante y permite detectar cualquier modificación posterior del documento firmado.
La firma electrónica cualificada: Es el nivel más alto. Se realiza mediante un dispositivo de creación de firma seguro y se basa en un certificado cualificado. Tiene el mismo valor legal que una firma manuscrita.
Cada nivel corresponde a usos específicos, dependiendo del grado de seguridad requerido.
El efecto jurídico de una firma electrónica eIDAS
El efecto jurídico de una firma electrónica eIDAS es un punto crucial. En virtud del artículo 25.2 del reglamento, la firma electrónica cualificada tiene el mismo valor legal que una firma manuscrita. Esto significa que puede utilizarse como prueba en un juicio y no puede ser rechazada por el mero hecho de ser electrónica. Esta equivalencia legal contribuye a establecer una confianza digital en toda la Unión Europea, garantizando la autenticidad e integridad de los documentos firmados electrónicamente.
En conclusión, esta última versión del reglamento eIDAS tiene como objetivo avanzar en la creación de un mercado único de identificación digital en Europa. A mediano plazo, los ciudadanos europeos podrán utilizar sus documentos de manera fluida en todos los países de la Unión Europea, acelerando así los intercambios y simplificando el comercio entre los diferentes países.
