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El email se ha convertido en una herramienta clave y de uso universal, pero aún genera muchas dudas si el correo electrónico sirve como prueba documental en un juicio. Una cosa es que este tipo de documento digital pueda analizarse y valorarse por parte del Magistrado, y otra muy distinta que los e-mails puedan considerarse prueba documental fehaciente.
En este post, analizamos si el correo electrónico puede servir como prueba documental a raíz de una importante sentencia del Tribunal Supremo sobre el tema.
¿Qué es una prueba documental?
La prueba documental es el medio de prueba que se aporta por las partes en un proceso judicial para demostrar los hechos que sirven de fundamento a sus pretensiones.
En los procesos civiles, estos documentos han de aportarse, salvo excepciones, con la demanda o contestación a demanda o al comparecer en juicios verbales a la vista.
Pueden ser escritos públicos o privados, o bien un soporte material que no tenga el carácter de instrumento, como son las fotografías, planos, etcétera.
Correo electrónico como prueba en juicio
La mayoría de las comunicaciones en el ámbito empresarial, laboral y, en general, de nuestra vida diaria, se realizan por medio del correo electrónico.
Por tanto, cada vez resulta más común presentar en los procesos judiciales pantallazos o impresiones de correos electrónicos con contenido útil para acreditar determinados hechos.
Este tipo de documento viene a sustituir a las comunicaciones por correo postal, o a los documentos entregados en mano, cada vez más en desuso, y más cuando el Tribunal Supremo en su Sentencia de la Sala de lo Social, de 23 de julio de 2020 ha reconocido el correo electrónico como prueba documental.
Esto ha supuesto otorgar al correo electrónico el valor de prueba capaz de acreditar hechos. Para alcanzar tal conclusión, la sentencia se basa en el concepto «amplio» de prueba documental:
“el avance tecnológico ha hecho que muchos documentos se materialicen y presenten a juicio a través de los nuevos soportes electrónicos, lo que no debe excluir su naturaleza de prueba documental’’ añadiendo que, (…) “si no se postula un concepto amplio de prueba documental, llegará un momento en que la revisión fáctica casacional quedará vaciada de contenido si se limita a los documentos escritos, cuyo uso será exiguo”.
Todo ello nos lleva a afirmar la naturaleza de prueba documental de los correos electrónicos.
Ahora bien, es necesario aclarar un punto fundamental respecto de su reconocimiento como prueba documental plena en el proceso.
El correo electrónico será documento hábil para sustentar un motivo de revisión fáctica de los hechos declarados probados en instancia cuando no se ha cuestionado su autoría y haya sido reconocido por la parte a quien pudieran perjudicar, en cuyo caso habrá prueba plena en el proceso y el órgano judicial no podrá negar la realidad de los e-mails, que tendrán valor probatorio respecto de lo que de ellos resulte.
Si, por el contrario, los correos son impugnados, en el sentido de cuestionar su autoría o autenticidad, por ejemplo, alegando que su texto ha sido manipulado, la parte que los hubiera aportado podrá practicar prueba pericial informática que corrobore su autenticidad (autenticación), y cuando no se pudiere deducir su autenticidad o no se hubiere propuesto prueba alguna, el juez o tribunal los valorará conforme a las reglas de la sana crítica (lo que priva al documento de fuerza probatoria plena).
Más información: La consideración del correo electrónico como prueba documental
Esta problemática se resuelve con otra herramienta digital avalada por el reglamento eIDAS de la UE ¿Sabes qué es un email certificado? Te lo explicamos a continuación.
Email certificado y su validez legal
El email certificado es una comunicación realizada por correo electrónico que garantiza la integridad y autenticidad de dicha comunicación. Sería como un burofax online.
En este sentido, el email certificado tiene un valor probatorio superior al de un correo electrónico normal. Así, aunque los emails ordinarios puedan aportarse como prueba documental en un juicio, pueden ser impugnados y es probable que se requiera la intervención de un perito especializado en informática, que pueda o no acreditar la realidad de esa comunicación, por lo que su valoración puede depender al final del juez o tribunal, como hemos comentado antes.
Sin embargo, en el email certificado la validez legal se acredita de forma inmediata. De este modo, por sí mismo y sin necesidad de documentos adicionales o la intervención de peritos, es prueba plena en el proceso.
Por tanto, quedará probado ante el juez o tribunal que el destinatario recibió el correo en una fecha determinada, acreditando así mismo el contenido de dicha comunicación. Sin duda, las implicaciones legales y prácticas del email certificado respecto del correo ordinario son importantísimas.
Más información: El e-mail certificado, una prueba irrefutable en una causa judicial
Signaturit somos proveedores de emails certificados, la herramienta perfecta para realizar aquellas comunicaciones que requieran un plus de seguridad.
Un correo electrónico normal puede ser impugnado, como hemos comentado. Sin embargo, hacerlo con un email certificado es casi imposible, ya que como compañía de certificación recogemos todo tipo de pruebas de la comunicación.
Actuamos como un tercero de confianza y recogemos los datos de la comunicación que prueban la transmisión, el acuse de recibo, las fechas de envío, el contenido íntegro del correo, así como la identidad del remitente y el destinatario y sus direcciones IP.
Además, a la vez que correos electrónicos certificados refuerzan el valor probatorio de las comunicaciones, también sirven para reducir costes al ser mucho más baratos que los conocidos burofax, por lo que se convierte en el sistema más adecuado legalmente y eficiente.
Correo electrónico certificado ¡Prueba gratis!
Como hemos dicho, una de las ventajas del mail certificado respecto de otros medios de notificación es su menor coste.
No obstante, dado que requiere la intervención de un prestador de servicios de certificación, así como el uso de una herramienta software específica, no es un servicio gratuito.
Si quieres comprobar la utilidad de este servicio de email certificado sin coste, puedes solicitar una prueba gratuita de nuestra herramienta, sin ningún compromiso. De este modo tendrás acceso gratis a enviar emails certificados y probar la firma electrónica.